Lema del día: Hablar está sobrevalorado.
No para de hacerlo el amigo de Bush, ese gran demócrata al que Bush no dió las gracias en su despedida, pidiendo elecciones anticipadas continuamente porque el pueblo, según él, así lo demanda, aunque en las encuestas el pueblo no quiere un político ni de lejos. También es curioso que él pida que se oiga al pueblo cuando durante su mandato, cuando el pueblo se manifestó masivamente para que no mandara tropas a Irak él los calificara de pancarteros y no les hiciera ni puñetero caso. ¿Pero eso es otra historia, verdad, señor Ansar?
Y por si no fuera bastante con escuchar a este hombre (dicen en los mentideros que pide "elecciones anticipadas" hasta en los restaurantes cuando le traen la carta de vinos), ahora resulta que el presidente del grupo Intereconomía, ejemplo todo él de tolerancia y talante democrático, un señor llamado Julio Ariza que parece que no tiene nada que envidiar a los democráticos Horcajo y Dávila, ha hecho unas declaraciones según las que el que llamar a una señora (en este caso la Consejera de Sanidad de la Generalitat) "guarra, puerca y zorra repugnante" es un ejercicio de libertad de expresión y no un insulto, y por tanto, el que esta señora demande al tertuliano de Intereconomía que lo dijo es una persecución hacia su grupo.
Cada vez me recuerda más todo esto a momentos en este país en los que entraban ganas de emigrar a Noruega o a cualquier otro país civilizado... o en el que volviera la censura y metiera a todos estos insultadores profesionales entre rejas.
Porque una cosa es la libertad de expresión, señores míos, y otra cosa es esta. No me sean demagogos, que bastante tenemos con Zapatitos.
No para de hacerlo el amigo de Bush, ese gran demócrata al que Bush no dió las gracias en su despedida, pidiendo elecciones anticipadas continuamente porque el pueblo, según él, así lo demanda, aunque en las encuestas el pueblo no quiere un político ni de lejos. También es curioso que él pida que se oiga al pueblo cuando durante su mandato, cuando el pueblo se manifestó masivamente para que no mandara tropas a Irak él los calificara de pancarteros y no les hiciera ni puñetero caso. ¿Pero eso es otra historia, verdad, señor Ansar?
Y por si no fuera bastante con escuchar a este hombre (dicen en los mentideros que pide "elecciones anticipadas" hasta en los restaurantes cuando le traen la carta de vinos), ahora resulta que el presidente del grupo Intereconomía, ejemplo todo él de tolerancia y talante democrático, un señor llamado Julio Ariza que parece que no tiene nada que envidiar a los democráticos Horcajo y Dávila, ha hecho unas declaraciones según las que el que llamar a una señora (en este caso la Consejera de Sanidad de la Generalitat) "guarra, puerca y zorra repugnante" es un ejercicio de libertad de expresión y no un insulto, y por tanto, el que esta señora demande al tertuliano de Intereconomía que lo dijo es una persecución hacia su grupo.
Cada vez me recuerda más todo esto a momentos en este país en los que entraban ganas de emigrar a Noruega o a cualquier otro país civilizado... o en el que volviera la censura y metiera a todos estos insultadores profesionales entre rejas.
Porque una cosa es la libertad de expresión, señores míos, y otra cosa es esta. No me sean demagogos, que bastante tenemos con Zapatitos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario