martes, 20 de abril de 2010

Tarde de boda

Lema del día: Me siento tan feliz porque ella se ha enamorado de miiii...

Pues llega abril y con abril las bodas en mi pueblo, para no perder la costumbre. Y como desde que soy jefe no paro de comer y desde que me convocaron la oposición ya es cuando mi estómago se ha convertido en un saco sin fondo, me he tenido que comprar un nuevo y carísimo traje... además de un cinturón, de vuelos, del regalo (que todavía no pagué) y de todos los gastos que originan las bodas a las que siempre me he negado a ir.
Pero por una vez en la vida, y sin que sirva de precedente me alegro de que esta haya llegado. Y me alegro porque voy a estar cuatro días sin escuchar hablar de papeles que rellenar, de formularios que enviar y de temas que estudiar.
Y por fin voy a tener una razón decente para no actualizar este blog... por fin...